Un reloj es una herramienta que nos hace únicos. En muchos casos sirve como seña de identidad de nuestra forma de ser. Por eso, en muchas ocasiones he echado de menos un reloj para ir al campo. Como gran aficionado a la naturaleza que soy, siempre me hubiera gustado uno que se adaptara a las situaciones y circunstancias que se viven cuando estás en estos lugares.
Dicen que los relojes automáticos suizos son los mejores. Y doy fe. Para mí un reloj perfecto para salir al campo estaría compuesto por una caja, pulsera y hebilla de color azul y todo ello de aluminio anodizado tipo aeroespacial. Dial de color azul con función cronógrafo con 3 contadores de color oro en la posición de las horas 2, 6 y 10 con segundero, fecha (también en ventana) y 30 minutos de crono respectivamente. Esto será perfecto a la hora de analizar el tiempo y la situación en la que nos encontramos.
Están realizados en un material muy consistente, vital por si se nos cae en algún movimiento durante las salidas al campo. Además, los modelos más modernos suelen tener también un GPS; que en caso de que nos extraviemos será la mejor forma de llegar a casa. Además, es resistente al agua y soporta inmersiones intempestivas.
Tiene que tener también un anillo interior azul inclinado y anillo superior con índices. Manecillas de horas y minutos en color oro con líneas en blanco fluorescente al igual que el punto de la posición de las 12 horas. La manecilla de los segundos es toda de color oro. Como podéis comprobar, este reloj existe, y es que el que pretendo que algún día me regalen. Lo reconozco soy un enamorado de la marca de relojes suizos. Otros tienen caprichos en forma de viajes, coches o motos, la mía es de relojes. Estos modelos también les hay con custumización de banderas. España, Francia, Brasil, Portugal, pero eso es más si quieres hacer patria.
Luego está la gama deluxe de romago, y no me refiero a Jorge Javier Vázquez y Belén Esteban, que ahora está en la casa de GH vIP, sino a un reloj que puede estar tasado en 163 euros, y que cuenta con una caja de acero inoxidable en color negro con 72 cristales Swarovski en el bisel, 16 cristales en sus extensiones y 55 cristales en el anillo interior de color negro. La correa es de piel auténtica de color rosa claro con la hebilla de acero inoxidable en color negro. El dial es de color negro con un total de 48 cristales. Las manecillas de horas y minutos son del color del níquel con color blanco en las puntas, siendo la manecilla de los segundos de color rosa claro en su totalidad. Interesante, ¿verdad?
Pues así son los relojes romago. Una auténtica sensación de sentirte más elegante y más tú. La verdad es que muchas veces cuesta ganarse dinero en relojes, pero está claro que al final lo barato acaba saliendo caro, e invertir en estos productos es una gran elección. Os lo digo por experiencia.