Los hoteles rurales se suman a la apuesta por el marketing digital en plena pandemia

Hemos pasado el que, probablemente, haya sido el verano más extraño de nuestras vidas. Sabíamos que podía pasar. Que el coronavirus hiciera acto de presencia de una manera tan potente en nuestras vidas no podía conducir a otra situación que no fuera la que todavía, a día de hoy, tenemos en nuestras calles y plazas. El COVID-19 ha atentado de una manera muy importante a nuestro modo de vida e incluso en vacaciones hemos tenido que cambiar nuestras costumbres con el fin de evitar contagios y permanecer a salvo en la medida de lo posible.

Eso ha conducido a mucha gente a pensar que era el año perfecto para practicar el turismo rural. Son muchas las familias que han apostado por esta manera de disfrutar de sus vacaciones en este 2020 y la verdad es que la sensación general entre todas aquellas que han dado este paso ha sido la de seguridad y tranquilidad, dos valores que, teniendo en cuenta lo que hemos vivido en este año, valen su peso en oro sin que quepa ninguna duda al respecta. Por eso este año el turismo rural le ha ganado la partida al turismo de sol y playa en líneas generales.

Una noticia que fue publicada en la página web del diario La Vanguardia indicaba que los turistas buscan una vida más rural y tranquila para disfrutar de sus días de vacaciones. La noticia, por cierto, no es de este año 2020, sino que ya cuenta con dos años de antigüedad. Y es que, a pesar de lo que venimos contando, es evidente que el turismo rural ya cuenta con una cierta tradición en nuestro país, una tradición que nadie puede borrar y que, lejos de eso, va a seguir incrementándose con el paso de los años.

En un país como el nuestro, son muchos los lugares rurales que podemos visitar y que, de hecho, han sido frecuentados durante este verano tan extraño. Una noticia publicada en el portal web Sensación Rural comentaba cuáles eran los más destacados: hacía referencia al Parque Nacional Picos de Europa, al Castillo de Rubió de Sòls, en Cataluña, a Sos del Rey Católico, a la Reserva de la Biosfera de Montseny, a la montaña palentina, a Santillana del Mar o al Parque Natural del Cabo de Gata, entre otros. La verdad es que estos nombres son de lo más destacado del turismo rural español y cada año llaman la atención de mucha gente, este año más si cabe.

La pandemia ha condicionado las vacaciones de todos los españoles, que, en general, han decidido apostar por otro modelo de turismo: el rural. Los hoteles rurales han encontrado así una oportunidad que no han querido dejar escapar para salvar esta temporada tan caótica. Muchos de ellos, que son hoteles de pequeño tamaño, se han visto obligados a diseñar nuevas estrategias de cara a captar la atención de otro tipo de público al que estaban acostumbrados. Desde Hotel-Up, expertos en diseño de páginas web para hoteles y marketing hotelero, nos han contado que estos hoteles son los que más han apostado este verano por estrategias ligadas al marketing digital.

Una alternativa saludable

Todas aquellas personas que hayan decidido apostar por el turismo rural este año lo han hecho, probablemente, a causa de las dificultades que presentan los lugares de costa a causa de las restricciones impuestas por las autoridades sanitarias para paliar el número de brotes y contagios. Pero la verdad es que esta alternativa puede convertirse en habitual a partir de ahora para muchas familias a la hora de planificar y organizar sus vacaciones. Y es que parece que todo el mundo se está dando cuenta de lo saludable que es este modelo de turismo.

Las causas de ello son de lo más variadas: en primera instancia, los lugares rurales son sitios en los que la calidad del aire es más grande que en ninguna ciudad. Por otro lado, es evidente que se puede disfrutar mucho más del descanso en un pequeño pueblo de montaña que en un lugar de costa que esté abarrotado durante todo el mes de julio y agosto. Finalmente, hay que decir también que este modelo de turismo, el rural, es más barato que cualquier otro, algo que seguro que también influye en muchas decisiones.

Nos da la sensación de que este es solo el principio, porque el turismo rural tiene un margen de mejora que entendemos que es considerable. Mucha gente, como hemos comentado, lo ha descubierto este año y ha sido capaz de entender y adquirir sus beneficios. Y estamos seguros de que, como consecuencia de ello, se ha planteado repetir de cara al año que viene. Eso, unido al desarrollo de estrategias de marketing digital de los pequeños hoteles rurales, hará que la presencia del turismo rural en Internet aumente y que, por tanto, muchas más personas tengan en mente esa posibilidad.